Cómo hemos cambiado

La típica imagen de la bibliotecaria clásica ha pasado a la historia. Antes sólo teníamos como arma la CDU, que lanzada de manera conveniente hace bastante daño pero no el que se merecen nuestros más pesados cenutrousuarios.


Con el paso del tiempo y la llegada de las tecnologías nos hemos ido modernizando. A través del ordenador hemos aprendido nuevos métodos de tortura y el carrito nos sirve para atropellar usuarios con la excusa de no haberlos visto cruzarse en nuestro camino...


Batgirl también es bibliotecaria (obsérvese lo bien pertrechada que va con su batCDU y sus batarangs para encollejar al primero que se mueva), el revival que estamos viviendo del pasado ha conseguido que ahora se lleve el look más atrevido tanto en mujeres...


... como en hombres... con sus armas más clásicas y al mismo tiempo mucho más efectivas: hacha de mano y estaca para acabar con el usuario más recalcitrante.


Y es que los bibliotecarios somos los auténticos héroes de nuestro tiempo, tenemos que estar preparados para todo.


 

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