Está claro que en estos tiempos de comprar y vender ya no sirve aquello de "el buen paño en el arca se vende", o por lo menos no sirve tanto.
Vender es el arte de hacernos desear lo que se ofrece, y si lo que se ofrecen son libros el resultado puede ser tan atractivo como este:
Quienes han ideado el anuncio han sabido pulsar las teclas adecuadas para emocionar a cualquiera que haya experimentado el placer de leer, de quedar suspendido en una historia mientras lo cotidiano se desliza a su alrededor.
Ojalá sirva también para que alguien que aún no lo haya sentido descubra esa inquietud, ese "a ver si termino con esto para leer un rato" o incluso ese "ya haré esto otro rato, ahora voy a leer"; le esperan los Buendía, La Mole, el capitán Acab, Juan Gualberto "el Barbas", el Pijoaparte, el doctor Sugrañes, Pilara...