- Periodicidad no determinable: le gusta sorprender. Nunca sabemos si vendrá o no, ni siquiera a devolver los libros que tiene en préstamo. También es aplicable, en el ámbito universitario, al profesorado —para este colectivo tendríamos que crear la periodicidad virtual: se manifiestan únicament por teléfono o correo electrónico.
- Anual: aparece una vez al año. Suele abundar entre el profesorado universitario y, antiguamente, entre algunos estudiantes que se lo jugaban todo a un examen final y sólo aparecían para prepararlo. Desde que funcionamos por semestres, son más raros y suelen confundirse con los bienales y los trienales: total quien se acuerda de su careto al cabo de un año?
- Bimestral: como el trimestral y el cuatrimestral, es uno de los grandes misterios de la biblioteca. Sus visitas no coinciden ni con períodos de préstamo, ni con la entrada de nuevas adquisiciones... pero existe. Le hemos visto. Nos hemos quedado con su cara.
- Bisemanal (dos veces a la semana): el más abundante es que aparece los lunes y los viernes. Los lunes, para contar a los amigotes o a las amiguitas lo que ha hecho durante el fin de semana; los viernes, para contar a los amigotes o a las amiguitas lo que hará durante el fin de semana.
- Diaria: es la más habitual en muchos estudiantes, que ya están en la puerta antes de que llegue el primer bibliotecario y no salen hasta que el último bibliotecario insiste en hacerle abandonar la sala. Otros muchos acuden diariament a buscar a los amigotes o a las amiguita para irse al bar. La más habitual también después de la puesta en marcha de los nuevos estudios de grado.
- Quincenal (cada dos semanas): un bimensual al que no le gusta que pongan en duda su orientación sexual.
- Semestral: periodicidad habitual entre los que sólo van a la biblioteca a estudiar para sus exámenes... finales. Durante unos días su periodicidad es diaria, pero no se les ve el pelo durante el resto del año. Se le reconoce porque se me estresa en cuanto se le dice que todos los ejemplares de tal libro están prestados.
- Bienal (cada dos años): la biblioteca no es para él/ella. Frecuente entre profesores e investigadores. Lo más habitual es que cada vez que vienen busquen el único libro que está perdido o que tengas que darles de alta de nuevo porque ya se había borrado su registro de usuario...
- Trienal (cada tres años): como el anterior, pero este siempre llega un año más tarde.
- Trisemanal (tres veces a la semana): es el que además de venir los lunes y los viernes (cfr. Bisemana), vuelve los miércoles para contar lo que ha hecho durante el fin de semana a sus amigotes o a sus amiguitas que no estaban el lunes...
- Tres veces al mes: que a treinta días por mes de media y diez de préstamo, es el que sólo viene a devolver libros y llevarse otros. Y, además, no suele renovarlos.
- Actualizado contínuamente: tiene la rara habilidad (Un sexto sentido? Una percepción extrasensorial? Consulta nuestra página web?) de aparecer por la biblioteca cada vez que se renueva el contenido del expositor de novedades: saca todos los libros, sean del tema que sean, los amontona en una mesa, (hace que) los consulta... y se va dejando los libros en cualquier parte menos donde los encontró.
- Mensual: este entra normalmente en la biblioteca por error o porque está buscando a alguien.
- No aplicable: estamos tan hartos de él, que ni nos importa si entra, si sale, si viene, si va... Lo único que queremos es perderlo de vista. Aplícase también al que pasaba por allí, vio una biblioteca y entró a ver que había dentro. No suelen volver.
- Trimestral: cfr. Bimestral. Solía aplicarse también a los que acudían al final del trimestre a preparar los exámenes de la asignaturas trimestrales. En vías de extinción, por cambio de planes de estudios.
- Bimensual (dos veces al mes): como el quincenal, pero sin complejos de ninguna índole.
- Cuatrimestral: cfr. Bimestral. Solía aplicarse también a los que acudían al final del cuatrimestre a preparar los exámenes de la asignaturas cuatrimestrales. En vías de extinción, por cambio de planes de estudios.
- Desconocida: el que no ha pisado la biblioteca en su p... vida, vamos. Cómo vamos a conocer su periodicidad si no le hemos visto nunca el pelo? También puede aplicarse a los del primer grupo.
- Semanal: este sólo viene a la biblioteca los lunes, para contar a sus amigotes o a sus amiguitas lo que ha hecho durante el fin de semana. Molesta menos que el bisemanal y que el trisemanal (sólo tenemos que oirle y reñirle una vez a la semana).
- Otras: los que sólo acuden a la biblioteca los fines de semana o los días festivos, que haberlos, haylos. Los que fluctúan. Los que vienen a recoger a su amorcito. Los cacos (menos los formales, que vienen siempre el mismo día a la misma hora).
Y seguro que a todos vosotros se os ocurren más casos que podríamos poner para ejemplificar cada categoría. Porque para gustos, los colores, y para cenutriousuarios, los de nuestras bibliotecas.
PS. Por cierto, si un periódico es una «publicación que sale diariamente», no es muy redundante definir un diario como un «periódico que se publica todos los días»? No habría bastado con «periódico»? En fin, misterios de los sabios académicos.