Parece que con la edad uno/a se va curtiendo y cada vez menos cosas le sorprenden o le impresionan. Pero no. Cuando crees que ya los has visto todo y que nada va a alterar tu equilibrio emocional, te plantan esta atrocidad delante de la cara.
Por Dios, solo se me ocurre gritar pidiendo venganza. Al autor de tal fechoría, ¡que le cooooorten la cabeza! (¡o las manos!…¡o lo que sea! ¡Vándalos sin corazón! Y con un tomo de la Britannica…Uix… )
A ver como consigo quitarme esta terrible imagen de mi cabeza ahora….