Una de las cosas que más me gustan de los libros es tocarlos, ver algo bello en sus portadas, sentir que las cubiertas son de cuero pulido o si son rugosas por qué lo son y fijarme que hasta el más mínimo detalle está perfectamente rematado. No penséis mal que tenéis la mente calenturienta.
Últimamente estoy catalogando este tipo de libros que suelen ser de gran formato, como catálogos de museos de arte, pinacotecas, diseño, arquitectura, ... Ya que los tienes "por castigo" sueles echarles un vistazo y descubres algo en ellos que te hace saber algo más en tu día a día. En este caso conocí al diseñador de las típicas sillas de tubo, Marcel Breuer. De paso conocí que se trata de un señor que nació en Hungría y con las cosas de la Segunda Guerra Mundial emigró a los Estados Unidos y diseñó unas sillas ...
Por supuesto que estos formatos son caros de bowls (ver precios de la tienda que lo vende en The Vitra Museum y más grandes formatos) pero para eso existen bibliotecas públicas, para no tener más que el beneficio de dar información a los ciudadanos. Os invito a dejaros cautivar por estos grandes formatos que tanto nos gustan a algunos y así poner hacer bueno el dicho de "nunca te acostarás sin saber algo nuevo"
Altalego