No sé a qué mente calenturienta se le debe haber ocurrido que las bibliotecarias andan desnudas entre los anaqueles de sus bibliotecas y que es menester vestirlas. Si no, uno no acaba de entender que alguien haya perdido el tiempo en crear una aplicación para vestir a la bibliotecaria.
O tal vez si lo entiendo, y precisamente la expliación de todo se encuentra en el adjetivo que acompanña a mente: calenturienta. Calenturienta debe ser la mente de quien no conformándose con el habitual y ampliamente reconocido glamour de las bibliotecarias patrias y nopatrias, del cual se ha hablado frecuentemente, ha decidido no sólo que hay que vestirla, sino también hacerlo dando rienda suelta a quién sabe qué fantasías... E incluso, dónde iremos a parar, a desnudarla!
Pues sí, queridas frikitecarias y queridos frikitecarios, eso existe: Librarian Dress Up! se llama el invento y sirve lo mismo para crear una Red Catwoman que una Liberty Librarian. El límite, su imaginacion (su perversión?), su navegador (mejor con IE) y el poco surtido indumentario del creador-barra-a del invento.
No me creen? Pues hala, sigan el enlace: Librarian Dress Up! Pero luego no digan que no les había avisado.
Visto en: «Vestir a les bibliotecàries» a Diari d'un llibre vell.