Inagurar una biblioteca: cómo hacer que sea un éxito

Una de las tareas más complicadas en cuanto a logística bibliotecaria es organizar una biblioteca partiendo de cero. Hay que organizar, programar y prever todo. Y seamos sinceros, es muy ingrato el hacer todos esos estudios de viabilidad, de usuarios potenciales, adquirir un fondo mínimamente decente y tener unas instalaciones correctas cuanto menos. Total, muchas veces, para qué: para nada, para que venga el politicucho de turno y se lleve todos los aplausos y todo el mérito a costa del sudor de los bibliotecarios. Pero no, amigos políticos, nos plantamos. No os pensamos poner las cosas fáciles. Si queréis inaugurar bibliotecas para subir vuestra cuota de popularidad, os haremos sudar de lo lindo. Nosotros a lo nuestro, o sea, a la gran vida. Si hay que inaugurar, se inaugurará, pero con las estanterías vacías.

MUAJJUAJJAUAUAUAA....



Mi duda existencial y que no me deja dormir estos días por la noche es ¿qué siente el bibliotecario en una biblioteca sin libros? ¿sin libros no hay usuarios? Si algún bibliotecario de allí nos lee y fuera tan amable de darnos su opinión, se lo agradeceríamos.

[Gracias a Manu por pasarnos el enlace]