Ahí están los pobres. Trabajan duramente cada día, sin descanso, sin pausa, sin quejas. Cuando acaba el día están doloridos y claman por un poco de atención: tanta patada voladora los deja exhaustos. Y ahí estoy yo, para darles sus masajes, sus pedicuras y sus baños relajantes en el mar. Sólo tengo un par, así que no escatimo esfuerzos. Los tengo tan bonitos...nadie los tiene más bonitos que una bibliotecaria, porque ellas saben lo que tienen...
No, no son mis pies, pero sí pertenecen a una de las perpretadoras de Frikitecaris...
En este estado de egocentrismo, mis pensamientos fluyen hacia el vino, los makis y el sushi. Como método de relajación y auto-mimos, funcionan a la perfección. Te relajas, desestresas, concentrado sólo en ese maki de pollo que hay enfrente tuyo, o mirando con ansiedad ese maguro tartar a escasos centímetros de tus palillos.
El próximo viernes día 7 de noviembre, para conmemorar la llegada a Barcelona de nuevas tropas frikitecarias, encabezadas por Fanhunter, haremos un homenaje a nuestros estómagos y brindaremos todos juntos la DMF en una cena sencilla y de buen rollete.
Quien quiera venir, que nos envíe un mail a nuestro buzón.
¡Os esperamos!